¿Cómo calmar a un bebé? Descubre consejos que son realmente eficaces

¿Qué podemos hacer cuando un bebé llora desconsoladamente? Una de las primeras cosas que pensamos es coger al bebé en brazos, pero puede darse el caso de que entonces llore entonces más fuerte. Veamos a continuación, cómo podemos calmar un bebé, aplicando consejos que son realmente eficaces.

Tener hambre, tener el pañal sucio, sufrir un cólico o no estar a gusto con la temperatura en el ambiente. Todas ellas pueden ser algunas de las causas que pueden hacer que el bebé se sienta incómodo de repente y aunque es importante averiguar cuál es la causa concreta para sus lloros o lamentos, podemos recurrir a varias pautas o «trucos» que nos van a ayudar a hacer que el bebé se calme de inmediato.

¿Cómo calmar a un bebé? Descubre consejos que son realmente eficaces

Ante el llanto incesante de un bebé muchos padres pierden la calma también, de modo que lo importante es estar tranquilos y actuar sin que nada nos altere para que nuestro bebé sienta que nosotros no contribuimos a la hora de transmitirle un mayor nerviosismo. Además de mantener nuestra propia calma, podemos aplicar otros trucos que os enumeramos a continuación.

1. Envuelve al bebé: Enrollar al bebé le ayuda a recordar el agarre cómodo del útero, haciendo que el entorno sea más familiar que todo ese espacio en la cuna. Deberás tener cuidado de no envolverlo demasiado, ya que se sentirá caliente e incómodo. En los días más cálidos, puede dejarlo en pañales y envolverlo en una simple toalla de baño cuando veas que se ha puesto a llorar de repente.
2. Coloca al bebé de lado: Acuesta al bebé boca abajo con el lado izquierdo del cuerpo sobre su brazo, dejando sus piernas y brazos libres. Esta es una posición que ayuda mucho a aliviar los calambres, ya que facilita la eliminación de gases, en el caso de que su llanto se deba a un cólico. Pero el bebé no puede dormir en la cuna en esta posición, ya que aumenta el riesgo de muerte súbita. Para dormir , debe colocarse boca arriba.
3. Haz ruidos repetitivos para calmarle: Podemos recurrir también al llamado «ruido blanco»con la idea de simular el sonido uterino. Son ruidos monótonos y repetitivos, como «shhh» en un tono alto, el sonido de un secador de pelo o el ruido de la radio a mitad de volumen. También puedes encontrar estos sonidos en YouTube.
4. Balancea al bebé: El bebé ha sentido todos los movimientos de la madre cuando estaba en el vientre y lo que debe hacerse entonces es balancearlo lentamente, con cadencia y a un ritmo regular y delicado. Deja su cabeza ligeramente libre pero apoyada para que se mueva suavemente con el movimiento. Si el bebé está acurrucado, será más fácil calmarlo con esta técnica.
5. Estimula la succión del bebé: Los bebés necesitan succionar, por lo que se calman con la lactancia o con chupetes. Pero esta técnica solo debe usarse cuando las otras ya han sido probadas para ayudar al bebé a diferenciar la sensación de hambre del deseo de alimentarlo. Muchos médicos también desaconsejan el uso de chupetes debido a los problemas que pueden causar en la formación oral del niño. Otros pediatras creen que cuando se usan solo para calmar al bebé en momentos de cólico y llanto excesivo, deben usarse, además de demostrar que previenen el síndrome de muerte súbita. En este caso, habla con el pediatra antes de ofrecerle el accesorio al bebé, ya que este tema es bastante controvertido.
6. Otras técnicas para calmar al bebé en caso de cólico: Además de los consejos ya mencionados, cuando el problema del malestar del bebé es el cólico, algunas otras técnicas pueden ayudar, como el uso de una bolsa con agua tibia en la barriga. El calor ayuda al bebé a relajarse y reduce el dolor, pero hay que tener mucho cuidado con la temperatura de la bolsa y siempre envolverla en una toalla u otra tela antes de colocarla sobre la piel del bebé. Por otro lado, los movimientos de bicicleta con las piernas del bebé también ayudan a liberar los gases y calmar a su hijo.

Con todos estos consejos podrás calmar de inmediato a tu bebé, pero te aconsejamos además que antes que nada compruebes cosas tan sencillas como ver si tiene el pañal sucio, si contrae mucho las piernas (señal de que tal vez contrae mucho las piernas) o si busca desesperadamente poder succionar (señal de que tiene hambre).